El salón es la parte de la casa con mayor funcionalidad. Es tanto una zona para el relax y como un espacio donde recibir visitas o comer en momentos especiales. Por ello, la distribución del salón puede resultar complicada a la hora de escoger los muebles.
Las claves para una buena distribución de los espacios es respetar las zonas de paso, estas deberán ser amplias diferenciando bien ambos ambientes. Visualizar el conjunto de la estancia para después encontrar los muebles que mejor se adapten será de vital importancia. Nos centraremos por tanto, en su forma y como en su tamaño.
En salones pequeños con una planta rectangular es muy probable que tengamos que distribuir los espacios de forma lineal, dejando un pasillo amplio entre los ambientes. En el caso de plantas en forma de “L” o más irregulares deberemos visualizar una línea diagonal imaginaria que separará cada espacio dando mayor sensación de dinamismo y aprovecharemos mejor el espacio.
Zona de estar relajante
En esta zona debe prevalecer una sensación de confortabilidad y relajación. Situarla cerca de una fuente de luz natural creará un ambiente cálido y el consumo de luz se reducirá.
El elemento principal es el sofá y por ello marcará la distribución del salón. Si el espacio es cuadrado lo más conveniente es situarlos enfrentados. En el caso de que sea rectangular, los asientos se dispondrán en forma de “L”.
Para que la zona resulte más interesante ubicaremos los sofás alrededor de un punto focal que llamará nuestra atención puede ser un gran ventanal, una chimenea… si no tenemos tanta suerte podemos usar un mueble excepcional o una obra de arte.
El comedor versátil
Ya que es la zona que menos se usa se ubicará en la parte más alejada de la claridad natural. Para conseguir que el espacio se adapte bien y deje el amplio pasillo de tránsito, escogeremos una mesa de la misma forma que el espacio que tenemos, es decir, si tenemos un espacio cuadrado la mesa será cuadrada o redonda. En cambio si tenemos un espacio alargado la mesa más adecuada será rectangular u oval.
Una vez sabemos qué tipo de muebles necesitamos debemos armonizar el conjunto de la estancia con una buena combinación de ambos espacios, utilizando adecuadamente texturas, colores y materiales.
Un error frecuente consiste en condicionar la distribución del salón entorno a un elemento de gran valor sentimental o económico. Si observamos que la distribución no fluye y que hay algo que nos obstaculiza tal vez sea el momento de eliminarlo y empezar de cero.
Reordenar, renovar y transformar hará que tu salón se vea dinámico y actual, no te canses de repensarlo y verlo de todas las formas posibles, cambiando las piezas y redescubriendo nuevos aspectos tu salón.